6 de mayo de 2009

PICO ANETO Y ESPALDA DE ANETO POR EL CORREDOR ESTASEN

Ascensión en solitario a las Agujas Escudier y Daviu, Aneto, Espalda de Aneto y Punta Oliveras desde el Refugio de Vallibierna, utilizando la vía del Corredor Estasen para acceder al cresterío.
Croquis del recorrido por las aristas grabado por el GPS sobre una ortofoto

Croquis del recorrido desde el vehículo

Martes 5
En contra de lo que suponía, logro llegar con el coche hasta escasos 30 minutos del refugio. Y en contra de lo supuesto, veo también otros dos vehículos estacionados. ¡Vaya, no voy a estar solo!
Me preparo rápidamente y comienzo la subida por la pista. El valle está precioso


Enseguida llego al refugio. Le pegan las últimas luces del día

El pico de Vallibierna cierra el valle

Ceno y para las 9 ya estoy durmiendo. Mañana me espera una dura jornada.
Miércoles 6
3:00 Suena el despertador. Me visto, desayuno y para las 3:30 comienzo la ascensión.
No hace nada de frío y enseguida compruebo el mal estado de la nieve, me hundo constantemente. Esperemos que más arriba mejore la calidad.
6:00 Llego al Ibón Medio de Coronas. He de confesar que en un momento dado se me pasó por la cabeza el abandonar. La subida del Ibonet de Coronas al Ibón Inferior fue horrorosa: ni siquiera con las raquetas podía evitar el hundirme. Menos mal que continué, ya que a partir del Ibón Inferior el estado de la nieve cambió completamente. A las 6:35 llego al Ibón Superior, que se encuentra totalmente helado y cubierto por la nieve. Por fin veo mi objetivo.

Comienza a amanecer

A las 7:00 me sitúo en la base del corredor. Me calzo los crampones y tiro para arriba.

Hace unos 20 años estuve aquí mismo con mi mujer, pero con unas condiciones completamente diferentes: aquella vez ni siquiera veíamos el corredor de la niebla que había e hicimos la ascensión casi a ciegas. En la base del corredor una enorme avalancha reciente tapa las huellas de los ascensionistas del fin de semana. He hecho bien en salir tan pronto

El sol ya está pegando en las altas cimas. Macizo del Posets.

Si todo sale bien, dentro de unas horas asomaré la cabeza por ese collado

La nieve está fenomenal. La huella de mis predecesores está tapada, y clavando sólo las puntas de los crampones, veo que mis gemelos van a sufrir. Un vistazo atrás:

Y otro hacia arriba. En lugar de utilizar la vía normal que gana altura por la izquierda de la Aguja Daviu, enfilo hacia la derecha, hacia la base de la Aguja Escudier, para acceder directamente a ella.


Ya no se ve la base del corredor

Que cerca se ve ya la cruz de la cima. Salgo de la oscuridad, y llego al sol. Tras una corta trepada, a las 8:25 llego al primero de los tresmiles de la jornada, la Aguja Escudier (3315 m) (nº 173)

Desde aquí contemplo otra de las cimas que tendré que ascender, la Espalda de Aneto, así como la arista que continua hasta los Russell, pasando por el Tempestades y el Margalida.

El Vallibierna

Después de almorzar algo, continúo la ascensión, que aquí hace mucho viento, de hecho, se llevó volando el mapa y todos los apuntes que llevaba. Voy dejando atrás la primera cima

A las 8:54 llego a la segunda cima, la Aguja Daviu (3350 m) (nº 174). Al fondo la cima del Aneto

Desde el mismo lugar un vistazo a la Cresta del Medio y La Maladeta

Desciendo a la salida habitual del Corredor Estasen, y a partir de ahora no hay más que seguir la buena huella que nos llevará hasta la cima

Aunque hay que poner las manos de vez en cuando, este tramo no presenta ninguna dificultad. Un vistazo atrás. A la izquierda se aprecia la salida habitual del corredor.

Ya sólo queda un sencillo paseo hasta la cima

9:14 Llego a la cima del Aneto (3404)
No hay nadie, ni se ve tampoco a nadie subiendo. Todo un lujo: solo en el techo del Pirineo.

Tercera vez que estoy en esta cima. La primera vez la subí con mi mujer por este mismo corredor el 1 de Julio de 1991, y la segunda, durante aquel mítico Nike Aneto X-treme Marathon el 20 de Junio de 1999:

Me asomo a contemplar la siguiente cima. ¡Qué lejos está...!

Otro vistazo a las agujas ascendidas

Dejo la mochila en la cima, y a las 9:20 comienzo el descenso hacia la Espalda.
Se pierde altura rápidamente

Llego a una travesía complicada donde tendré que recordar las clases de funambulismo

Bueno, no ha sido tan complicado...

Todavía hay que atravesar algún tramo más difícil

Tengo que dar mil vueltas para localizar la vía más sencilla. En la foto que saqué a la vuelta, se aprecia por donde superé esta aguja

Ya sólo queda superar la pala final

9:54 Llego a la cima de la Espalda de Aneto (3350) (nº 175)
He perdido mucho tiempo intentando localizar el recorrido

Situación de esta cima vista desde el cresterío de Llosás

Las vistas, impresionantes...

Me asomo a la continuación del cresterío: Tempestades, Margalida, Rusells, Salenques.... Uf.
Algún día habrá que ir por ahí...

Apenas paro en la cima. Conociendo el recorrido, atravieso más rápidamente el cresterío
Ya estamos otra vez en las cornisas...

Se acabaron los tramos complicados

A las 10:20 vuelvo a la cima del Aneto. Sigue estando solo mi mochila
Descanso tranquilamente disfrutando de las vistas, hasta que veo llegar un esquiador al Puente de Mahoma. Lo supera sin ninguna dificultad; es un miembro del GREM de la Guardia Civil. Comenta que han salido desde Senarta y que han adelantado a la altura del Portillón a los que han dormido en La Renclusa. Vaya máquinas... Al cuarto de hora llega el resto de sus compañeros.
Es hora de comenzar el descenso.
Un vistazo al Puente de Mahoma antes de atravesarlo:

Y una vez superado.

Ya solo queda perder altura para dirigirme al siguiente pico

Durante el descenso me cruzo con más de una docena de esquiadores que afrontan la última pala de la ascensión.

11:20 Llego a la Punta Oliveras (3298 m) (nº 176)

Bonitas vistas tiene esta cima también



Por este valle tendré que bajar dentro de un rato y le está pegando el sol desde hace tiempo. Ya veremos como está la nieve...

Y pensar que la idea original era haber ascendido también al Coronas...

Bajo hasta el Collado de Coronas. Me cuesta un poco atravesarlo.

Y ahora sí, comienzo el larguísimo descenso hacia el valle de Vallibierna.
Un último vistazo al Corredor Estasen


Me pareció oir voces por la arista, y estuve fijándome, pero no vi nada.
Una vez en casa, y ampliando la foto, se aprecia una cordada de tres metidos en la variante de salida Petit Black

Durante el descenso voy recordando historias ocurridas en estos cresteríos.
Vaya susto que nos diste en aquel rápel, Fidel


Aragüells, lo subí en compañía de mi hijo.
Aguja Haurillón, dentro de poco iré a visitarte

Agur, Aneto. Volveré.

Al llegar al Ibonet de Coronas decido descansar. Me siento en la hierba (estoy harto de tanta nieve sopa-sopa...) y disfruto de las vistas mientras como tranquilamente junto al arroyo

A las 14:30 llego reventado al refugio. Menos mal que el coche no está muy lejos

Fin de esta preciosa, pero agotadora actividad