La idea era, una vez acabada la escalada de este pico, continuar recorriendo el larguísimo cresterío de las cimas que se unen con el Circo de Crabioules por el Oeste y que llega hasta la Estación de esquí de Superbagnères por un terreno desconocido para mí. De esta forma, tras descender del Grand Quayrat al Col du Quayrat por la vía normal de ascensión desde el Refugio de Espingo, perderíamos algo de altura por el descompuesto y herboso corredor Este, que ya conocía de anteriores ascensiones, y tras bordear por su base el tramo de arista complicado que une las dos cimas, ganaríamos de nuevo la cresta a través de otra empinada ladera herbosa.
Una vez en la cima del Petit Quayrat, la idea era continuar por lo que a priori parecía, visto desde lejos, un herboso y fácil cresterío recorriendo unas cimas formadas por suaves ondulaciones -Cap des Hounts-Secs, Pic de Coume Nère y el Pic de Subescale-, hasta llegar al Col de la Coume de Bourg, en donde empalmaríamos con la GR-10. De aquí iríamos perdiendo altura hasta llegar al Col d´Espingo y ya por terreno conocido, solo nos quedaría ir perdiendo altura hasta al lugar de partida en las Granges d´Astau, en donde dejamos el coche. La verdad es que las ondulaciones que formaban las montañas no permitían ver todo el recorrido del cresterío y muchos tramos estaban ocultos, pero vamos, no iba a haber complicaciones entre estas suaves laderas herbosas, ¿no?, pero... ¿y si sí?
Este es el resumen gráfico de la larga jornada que finalmente nos salió:
El martes, desde el Col d´Espingo vemos por primera vez el itinerario de la escalada. La dificultad de la vía está graduada como PD, con numeros pasos de II y alguno de III.
La idea original era haber escalado este día la Arista Oeste del Perdiguero, pero Régis, el guarda del Refugio del Portillon, nos lo desaconsejó totalmente: el acceso al Portillón de Ôo por el Glaciar du Portillon, estaba completamente helado y atravesar este empinado tramo, incluso con crampones se hacía muy complicado. Además, los desprendimientos eran constantes. Hubo que buscar otra bonita alternativa sobre la marcha y esta es lo que surgió...
A las 08:10 horas empezamos a andar.
Desde el refugio contemplamos nuestro objetivo. Se aprecia la base de la Arista NW, hacia la cual debemos de dirigirnos:
Una mirada atrás a nuestro objetivo inicial, la Arista O. de Perdiguero:
Dejamos el sendero habitual que se dirige hacia el Refugio de Espingo y penetramos en el torrente de La Neste d´Ôo. La última vez que lo recorrí, hace un año, no veíamos a tres metros por delante, por la niebla que había...
Ahí enfrente tenemos las agujas que forman el comienzo de la arista y que debemos de bordear por la izquierda:
Una vez atravesadas, hay que ganar altura a través de empinadas laderas de hierba. Vamos siguiendo un sendero marcado con hitos que nos llevaría a la unión con la vía normal desde el Refugio de Espingo.
Las agujas que nos sirven de referencia y por encima de ellas, la repisa blanquecina por la cual se accede al comienzo de la vía:
Al fondo asoma el Petit Quayrat. Luego iremos a por él...
Llegamos a la base de la arista en hora y media. Nos colocamos el material y tiramos para arriba.
En este primer tramo, la arista no está nada definida y se va ganando altura por donde mejor nos parece.
Este es el panorama de lo que tenemos por encima:
Trepada por roca sólida y disfrutona...
Según ganamos altura, la arista se va estrechando y definiendo mejor:
Un vistazo al tramo recorrido:
El Petit Quayrat y el Cap des Hounts-Secs al fondo a su izquierda.
Una vez superado el tramo más complicado de la escalada por buen granito, llegaremos a una zona esquistosa de roca rojiza descompuesta.
Durante la escalada, hemos ido dejando el amplio Couloir des Avalanches a nuestra derecha.
Ánimo, que queda poco...
pero lo poco que queda está roto-roto:
14:25 Llegamos a la unión con la arista de subida por la vía normal. Tenemos el Grand Quayrat Norte justo encima de nuestras cabezas.
Nos queda una larga tirada hasta el coche, por lo que ni nos planteamos subir a la cima. Una foto-cima....
y un vistazo a lo que nos queda por recorrer:
Vamos para abajo... Una vez en el Col du Quayrat, bajamos en dirección a los Lacs de Crabioules.
Vamos bordeando la arista SO...
hasta llegar a un corredor herboso que nos va a permitir ganar de nuevo la arista.
Una vez en ella, un vistazo atrás hasta el Grand Quayrat:
Unas últimas trepadas:
y para las 16:45 horas llegamos a la cima. De allí venimos:
Me asomo para ver la continuación de la travesía y veo con preocupación que vamos a tener que destrepar por un tramo vertical y atravesar después una larga y recortada arista de rocas para llegar al Pic de Cap des Hounts-Secs.
Vamos perdiendo altura por la cresta hasta llegar a una brecha desde la cual podemos descender a la vertiente de Sarnés e ir bordeando el tramo más complicado por su base. El Petit Quayrat va quedando atrás...
Seguimos ganando altura por el largo cresterío horizontal. ¡Qué lejos queda el Grand Quayrat!
Ahí mismo tenemos ya el Cap des Hounts-Secs. Parece un bonito paseo por hierba...
pero no, siempre tiene que aparecer un cresterío rocoso...
Por fin, para las 19:10 llegamos al enorme hito cimero del Cap des Hounts-Secs.
La continuación hacia la siguiente cima, el Pic de Coume Nère es otra sucesión de gendarmes aéreos. Está claro que si continuamos por la cresta, se nos va a hacer de noche en ella, y tampoco es plan, por lo que descartamos el continuar por el cresterío e iremos perdiendo altura por la vertiente occidental para llegar hasta la senda que desde la Cabaña de Crabioules/Sarnés se dirige hacia el Col de la Coume de Bourg, en donde llegaríamos a la GR-10 y siguiéndola podríamos bajar hasta el coche, aunque sea de noche.
Última foto que podemos sacar con luz. Al fondo se aprecia el Valle de Lys y la niebla comienza a cubrir la estación de Superbagnères:
A partir de aquí todo es una aventura: tendremos que perder unos 400 metros de desnivel por laderas herbosas con algún que otro cortado vertical, intentando localizar una cabaña en la cual podamos dormir, que hemos visto desde los altos y que no aparece en el gps. Aunque anduvimos dando vueltas intentando localizarla, no llegamos a verla, pero por lo menos una vez en el sendero, no había más que seguirlo en dirección al collado. La luna llena nos facilitaba el avanzar teniendo visibilidad.
Para las 22:30 horas llegamos al Col de la Coume de Bourg.
Ahora tendremos que ir bordeando y perdiendo altura por la amplia vertiente de Médassoles hasta que a las doce de la noche, a unos 2.100 metros de altura y completamente agotados, decidimos echar una cabezada junto al camino protegidos del viento por una gran roca. Nos ponemos encima toda la ropa que llevamos y utilizando las mochilas como almohadas, las mantas térmicas de edredón y abrazados el uno al otro, intentaremos dormir.
A las 04:00 horas, Mari Carmen dice que no puede aguantar más el frío, por lo que continuaremos el recorrido. Todavía nos quedan varias subidas importantes y a las 06:20 llegaremos al cruce con el sendero que viene desde el Col d´Espingo. El cansancio acumulado y los dolores -alguna que otra caída ya hemos tenido- nos hacen avanzar despacio y a la altura del Lac d´Ôo veremos amanecer.
Últimos kms por pista hasta llegar por fin a las Granges d´Astau a las 09:09 horas.
Desde luego, esta no ha sido la mejor manera de celebrar nuestro 26º aniversario de bodas. El año que viene nos iremos a un balneario.... si todavía me aguanta...