11 de junio de 2009

PICA D´ESTATS DESDE ORRIS DE CARLA

Ascensión en solitario a los picos Cap de la Coma de Riufred, Sotllo, Punta Verdaguer, Pica d´Estats, Punta Gabarró y Pic Rodó de Canalbona a través del Corredor de Riufred partiendo desde los Orris de Carla.
Me apetecía volver a ascender a este macizo utilizando un recorrido diferente y más original a los dos habituales y que ya conocía: las vías normales desde el Refugio de Vallferrera a través del Barranc de Sotllo, o el del Refugio de Pinet a través del Barranco de la Cometa d'Estats.
Después de buscar un montón de información, ví que existía un recorrido que ya aparece indicado en el clásico libro de Patrice de Bellefon "LOS PIRINEOS-LAS 100 MEJORES ASCENSIONES Y EXCURSIONES" (lo cual daba idea de la belleza del recorrido) que utilizaba el Corredor de Riufret (Riufred) para ganar el collado homónimo desde el Embalse de Soulcem, accesible desde el Valle de Auzat-Vicdessos, una zona que muchas veces he visto señalizado en nuestro viaje hacia Andorra desde Francia, pero al cual nunca se me había ocurrido ir.
En el 3er libro de Luis Alejos "3000 m. de los Pirineos" indica una vía (412), que asciende al Sotllo desde el Refugio de Broate a través de un collado sin nombre (tanto en mapas franceses, como en el ICC catalán le denominan Col dels Guins de l'Ase).
También hace constar que es accesible desde la vertiente de la Cometa d'Estats.
Bueno, ya he localizado un recorrido que permitiría subir al Col de Riufred, bajar a la Cometa d'Estats, subir al Col dels Guins de l'Ase por un nevado corredor, ascender al Pic de Sotllo y tras descender al Port de Sotllo trepar a la Pica d'Estats a través de la cresta occidental.
La cresta que une esta última cima con el último tresmil del cresterío, el Rodó de Canalbona, está suficientemente documentado, por lo que no habría ningún problema en continuar la travesía. El problema vendría ahora, necesitaba localizar un paso que me permitiese descender de nuevo al Barranco de Riufred.
En el tomo V del libro "Pirineos 1000 ascensiones" de Miguel Angulo, en el croquis de ascensiones del macizo de la Pica d'Estats, aparece dibujado (aunque no reseñado) un descenso desde el Collet Franc hacia el Etang de Canalbona y al Corredor de Riufred después, con lo cual, el bucle estaría, por lo menos sobre mapa, dibujado.

Perfil del recorrido grabado por el gps

Hacía falta verlo sobre el terreno.
Llego al Embalse de Soucem en unas cuatro horas y media desde Donostia, después de recorrer medio Pirineo por la autopista y atravesar Foix y su fantástico castillo

La intención es dormir en los Orris de Carla, unas construcciones pastoriles realizadas en forma de iglús a base de piedras...

situados junto al Embalse de Soulcem, a una altitud de 1650 metros y accesibles en vehículo.
Durante el invierno, la pista suele estar cortada hasta el 15 de Mayo, según la nieve. En este caso, el vehículo habría que dejarlo a unos 2 km antes del embalse


Desde aquí se observa la vía de ascenso que gana altura a la derecha del torrente

y localizo también el puente que mañana tendré que atravesar a oscuras para llegar hasta la base de ese torrente

Aunque los orris no presentan un estado de abandono, la verdad es que no resulta nada apetecible dormir dentro de ellos, por lo que aprovechando que hay un centro de información junto al parking...

me preparo un buen lugar donde dormir. En peores sitios ya habré dormido...

A las tres y pico de la madrugada me despierto bajo la luz de una preciosa luna llena que ilumina toda la zona


y a las 03:45 comienzo a andar. Desde el puente fotografío la luna reflejada en las revueltas agua del río

El sendero está balizado con una franja roja pintada en las rocas.

Como veré más tarde bastantes veces, el sendero no está suficientemente bien señalizado (marcas que no se ven en el sentido de subida, por ejemplo) y ello unido a que de noche disminuye la visibilidad hace que en unas cuantas veces pierda el sendero entre tanto rododendro en flor que hay en este primer tramo en el cual se va perdiendo altura hasta llegar al encuentro del torrente con el embalse. Menos mal que en esta primera parte el camino aparece señalizado en el mapa del gps, el Topo Pirineos 2.7 (gracias a su autor si me lee) y hace que vuelva a recuperarlo en seguida. No soy el único que madruga

Al llegar al encuentro con el torrente, me surge un problema: el río esta tan crecido que no hay manera, por más que lo recorro de arriba a abajo, de localizar un vado por donde cruzarlo sin mojarme. Al final decido lanzar la mochila a la otra orilla, y pegar yo después un gran salto. ¡Menos mal que tengo las piernas largas!
He dibujado sobre una fotografía anterior el recorrido utilizado en el siguiente tramo de una manera muy poco precisa, pero por lo menos os haréis idea de lo salvaje de la ascensión. Una pequeña senda, apenas marcada, va ganando altura por la empinada ladera teniendo que utilizar las manos de vez en cuando para trepar por pequeños tramos rocosos.

A media ladera más o menos, comienza a amanecer (entre las pérdidas y el vadeo del río he perdido bastante tiempo)

Una gran masa de nubes ha entrado por el norte y ha cubierto totalmente el embalse.

Como me daré cuenta más tarde, esta va a ser la tónica de la jornada: la vertiente norte de la zona va a permanecer durante todo el día bajo un espectacular mar de nubes.
Cuando ha clareado lo suficiente, observo la parte final de este empinado barranco, y compruebo como la nieve que lo cubre, está lo suficientemente compacta como para permitir trepar por su interior. Hasta ahora, entre la cantidad de agua que cae, que hace que más que un corredor nevado aquello se pueda utilizar para realizar un descenso de cañones y a que en los tramos nevados, debido a lo avanzado de la temporada, surjan grandes agujeros-puentes de nieve peligrosos de atravesar, he tenido que subir por el tramo herboso.
A partir de ahora, y viendo que la ascensión es ya segura, destrepo hasta el interior del encajonado barranco, y prosigo, esta vez ya, pisando nieve.
El sol empieza ya a pegar por las alturas

Y mirando atrás no voy a poder ver el embalse

Llego al bonito Etang de Riufred (2360) con su curiosa "cascada de seracs"

Hay que atravesarlo por su derecha avanzando con cuidado sobre sus heladas aguas

En este siguiente tramo, la pendiente nos da un respiro y tendremos que llanear un rato mientras buscamos el paso más accesible para ganar la otra orilla del arroyo. Aprovecharé un sólido puente de nieve

Hay que ganar altura hasta ese paso que se aprecia a la izquierda de la cascada

Una vez superado este tramo, la ascensión vuelve a empinarse.
De aquí hasta el Collado de Riufred no va a haber tregua...

Por fin tengo el collado a la vista. Un poco más arriba de donde está sacada la foto me calzaré los crampones, ya que la nieve aquí está un poco más dura que en el resto de la ascensión.

Ánimo, que está ahí mismo...

De ahí abajo vengo

Por fin. He tardado cuatro horas y media agotadoras en llegar hasta aquí, pero sólo las vistas justifican el esfuerzo

Entre las cimas que se contemplan, tenemos una novedad justo encima nuestro, a la izquierda de la fotografía: un nuevo tresmil bautizado como Cap de la Coma de Riufred, cuyo "descubrimiento" se publicó en el Butlletí del Centre Excursionista de Castellar de Septiembre de 2007, nº 470, pag. 14. También se hizo mención de ello en la revista Vertex nº 217.
Según la cartografía del ICC a escala 1:5.000, la prominencia de este pico con respecto al pequeño collado que lo separa de la Pica d'Estats, es de 10,4, motivo por el cual debería ser incluído en el listado oficial de tresmiles del Pirineo.

Por si acaso incluyen esta cima en el listado, habrá que ascenderla...

Hasta aquella brecha tendré que dirigirme después

La arista se estrecha

Último metros...
Por fin. Cinco horas me ha costado ganar este primer tresmil de la jornada (lástima que no lo pueda tachar, jeje). Al fondo asoma el Montcalm, el tresmil más oriental y el llamado a ser mi último tresmil. No lo ascendí precisamente para ello.

Se aprecia el itinerario de subida, al igual que el Etang de Riufred enmarcado en rojo.
Al fondo, entre nubes, el Embalse de Soulcem

Dentro de unas cuantas horas andaré por ahí arriba

Pero antes debo de perder casi 300 metros de altura para llegar hasta el Etang de la Cometa d'Estats (2736), que se encuentra helado. En la foto se aprecia también la brecha a la cual me dirigiré después, así como la cresta septentrional del Sotllo, por la cual tendré que trepar.

Un vistazo al corredor desde su base. Su inclinación no llega a los 45º, y la nieve, al igual que en todo el resto de la ascensión, está estupenda.

De allí arriba vengo

Después de un buen rato sentado encima de un bloque de piedras descansando y cogiendo fuerzas, reanudo la ascensión. He dibujado el itinerario utilizado para llegar hasta aquí y el collado al cual deberé de descender desde la cima del Sotllo, el Port de Sotllo.

El último tramo se realiza por un descompuesto pedregal, pero aún así se llega sin dificultad al Col dels Guins de l'Ase (2866)

Me asomo a la vertiente de Broate. En su día llegué a plantearme esta travesía partiendo desde ese refugio

Bueno, habrá que comenzar la trepada. Esta cresta septentrional está catalogada con una dificultad de PD, además tampoco tiene pinta de ser complicada

La verdad es que apenas se sigue el cresterío íntegro, se van esquivando todas las dificultades por donde mejor se puede. Es una pala tan amplia, que no hay problemas en subir por donde te apetezca. Tal y como se aprecia en las fotos, la calidad de la roca no es que sea muy buena


En el tramo final de la arista si que hay que recorrerla por el filo



¡Ánimo que queda poco!

Últimos metros antes de la antecima del Sotllo, el Sotllo N.

Pic de Sotllo N (3053) Separada por una pequeña brecha, está la cima principal

Ahora sí. Últimos metros...

Pic de Sotllo (11:10). Echo una firma en el libro de la cima.

Y contemplo las vistas mientras como algo. La vía normal desde el Refugio de Valferrera (vaya recuerdo que tengo de aquel descenso...)

El macizo de la Pica d´Estats, a donde me dirigiré dentro de un rato

y al oeste unas montañas totalmente desconocidas para mí. Sólo conozco el Certascán de la travesía de la Porta del Cel.

Tras descansar un buen rato, comienzo el descenso hacia el Port de Sotllo. El primer tramo es una pedrera totalmente descompuesta (la subida por aquí debe de ser rompedora), pero en cuanto llego a la nieve...

y a pesar de que no me suele hacer mucha gracia, me deslizo haciendo culo-esquí hasta que ya no puedo descender más de esta manera. Un vistazo a este rápido descenso

Ya tenemos de frente la cresta occidental. Recuerdo el descenso por ella la anterior vez que estuve en la Pica d´Estats, y me acuerdo que la única dificultad eran un par de chimeneas en las cuales había que descender en oposición. Ya veremos que tal guardo los recuerdos...

Llego al Port de Sotllo. Un vistazo a esta cima.

Otro vistazo hacia el Barranc de Sotllo, vía habitual desde el Refugio de Vallferrera.
El Monteixo destaca en la lejanía

Bueno es hora de comenzar la trepada por la cresta occidental. Hay un par de chimeneas por las cuales se puede comenzar. Tomo la de la izquierda. Se me olvidó el sacarle una fotografía.
En esta se aprecia el tramo situado justo encima de la chimenea de acceso.

Un vistazo al Estany d'Estats

En esta cresta, al igual que en la anterior, tampoco se va por el mismo filo,
se van sorteando las dificultades por la amplia pared

La verdad es que hay un montón de opciones para ir avanzando, y seguro que aunque se suba varias veces, en todas ellas se irá por sitios diferentes. Una de las chimeneas que hay que superar.

Hay también terrazas por las cuales tendremos que avanzar...

La vía está profusamente señalizada con hitos. Al llegar a una cierta altura, vemos asomar el Pic Verdaguer por encima nuestro.

De ahí abajo vengo

Justo debajo se observa el Etang de la Cometa d'Estats

Seguimos con la tónica de la arista: podemos elegir por donde subir

El Sotllo queda atrás

Un vistazo a este tramo de subida

Ya vemos la cima

Pico Verdaguer (12:45)

La Pica d'Estats se ve aquí mismo

Por ahí abajo he andado hace unas cuantas horas

Un impresionante mar de nubes cubre toda la vertiente norte

Apenas paro en esta cima, y desciendo a la brecha que separa estas dos cercanas cimas. El embalse sigue cubierto por la niebla

Ya está aquí mismo la cruz cimera

Pica d'Estats. POR FIN (13:05) Techo de Catalunya y el Ariège

Tengo muchas ganas de realizar la siguiente arista, la que me llevará hasta la Punta Gabarró.
Aunque se considera una única cima, la verdad es que esta formada por dos: la más alta y la que da nombre a la montaña y donde está situado un vértice geodésico, y la denominada Punta Bessona, separada de la principal por una pequeña brecha.

La arista enseguida se estrecha, y aunque de momento no presenta ninguna dificultad, sí que hay que avanzar por tramos aéreos y expuestos.

Justo después de la foto anterior llega el primer obstáculo de la arista, un pequeño tramo que hay que destrepar. La verdad es que en toda la arista sólo hay dos tramos en los cuales es necesario realizar una pequeña escalada (PD+), pero son tramos en los cuales se desciende a una repisa, por lo que no tendremos esa sensación de caída al vacío.
Evidentemente, si realizamos el tramo a la inversa, estos tramos son más sencillos.

Me acerco a la siguiente chimenea.

Aunque se trata de un tramo bastante vertical, la roca es segura y hay buenas presas para pies y manos. Me descuelgo rapidamente por ella...

y llego quizás al tramo más complicado de la ascensión (III), un corto destrepe de unos tres metros..
Como tengo las piernas largas, no me cuesta mucho destreparlo. A una persona más baja, le costaría más: las presas están algo separadas.

El mismo tramo visto desde más lejos. Se aprecia la amplia explanada de su base.

He leído en otras descripciones (como ESTA del gran † Claudix), que ellos evitaron estos empinados destrepes bordeándolos por el sur. Quizás esa sea la vía normal, y yo me confundí, ya que en sus fotografías se ven hitos y además es más sencilla que seguir la arista íntegra.
Estoy seguro que a Claudio no le hubiese importado que colgase esta descriptiva fotografía de la vía que siguieron ellos.

Aunque la arista continua siendo aérea, las dificultades han finalizado

A medida que nos acercamos a la cima, esta se empina...

pero como veremos, no aumenta la dificultad. Se continua simplemente andando, utilizando las manos de vez en cuando para mantener el equilibrio.Un vistazo atrás

Últimos metros de arista...

Llego al vértice geodésico. Punta Gabarró (13:25)

He recorrido este tramo en apenas 20 minutos

Al otro lado de la brecha nevada se encuentra la otra cima, la Punta Bessona

Y por debajo nuestro el siguiente tresmil, el Rodo de Canalbona

Rapidamente cruzo a la Punta Bessona

Comienzo el descenso de esta descompuesta cima

Ahí mismo tenemos la cima

Pero antes debemos de perder altura por esta descompuesta ladera. Este tramo es el peor en cuanto a calidad de roca de toda la travesía, y el ascender por aquí debe de ser agotador.

De repente, ¡sorpresa! veo surgir el Etaing de Canalbona, la clave para poder descender de nuevo al fondo del canal de Riufred. El corredor por el cual tendría que descender no parece muy empinado y se ve cubierto de nieve. De momento tengo suerte, aunque no se ve lo que hay más allá del lago.

Detrás de esta cima se encuentra el Collet Franc, de donde podré ver mejor como es este corredor, e intentar descenderlo

Llego a la base del pico. Van a ser unos pocos metros de subida por un sencillo sendero

De ahí arriba vengo

Últimos metros de ascensión

Rodo de Canalbona (14:00)

El Estany Gelat hace honor a su nombre

Pero no tengo ganas de contemplar el paisaje, lo único que deseo es averiguar si es posible ese descenso desde el Collet Franc. En la fotografía se aprecian las cimas de Canalbona. Estando más en forma, habrían sido una excelente opción para haber realizado un recorrido circular perfecto: se trataría de continuar por sus aristas, con una dificultad similar a la que hemos realizado, y el descender a través de los Lagos de la Gardelle directamente al Embalse de Soulcem. Por si alguien se anima, lanzo la pelota..

Bueno, llego al collado y no puede haber una mejor noticia: el descenso es factible. La verdad es que no quería ni pensar que es lo que hubiese pasado si el descenso hubiese estado imposible.

En el collado ya me fijé, pero no le di mayor importancia: había pintada una roca con un círculo de pintura azul. Comienzo el descenso por un descompuesto corredor de piedras, y veo como hay otro círculo pintado en otra roca: ¡son marcas de sendero!. Se supone entonces, que hay una continuación en el descenso...

Enseguida llego a la nieve, y me tiro sentado hasta que se acaba la pendiente

De ahí arriba me he tirado

Llego al pequeño lago, y por más que miro no localizo las marcas de pintura azul...

De todas formas, me asomo al camino más evidente, un corredor más empinado que el anterior, que desciende de forma continua, sin ninguna barrera rocosa por medio, hasta el fondo del Corredor de Riufred.

Bajo poco a poco hasta que finalmente llego al fondo del corredor. Un vistazo atrás.

He llegado a un terreno conocido, la última subida hacia el Collado de Riufred.
Hace más de diez horas que subí por aquí...

Ya más tranquilo, viendo que he podido descender sin problemas, continuo el descenso.
Un poco más abajo de donde está tomada la última fotografía, subió la niebla del fondo del valle e hizo que no pudiese volver a tomar más fotos hasta casi llegar al embalse, donde de nuevo volvió a despejarse. Decidí no bajar por la nieve en el tramo más encajonado del corredor, y descender por el sendero balizado una vez llegué al Etaing de Riufred. Este sendero va perdiendo altura por unas empinadas pendientes de hierba larga, a un paso del precipio. Con la nieve cubriendo las laderas, me imagino que será mucho más seguro subir por el mismo corredor, ya que por que aquí, un resbalón y no lo cuentas. A unos trescientos metros por encima del embalse, la niebla comienza a disiparse, y lo puedo ver, por primera vez en todo el día

¡Qué ganas tenía de poder ver esto...!

Pero antes habrá que atravesar un penúltimo problema: una lengua de nieve horadada como un queso de gruyère por el agua, por el lugar por donde más sólido parezca. La verdad es que cuando subí de noche no daba tanto miedo.

Ya he llegado casi hasta la orilla del embalse. El volumen del agua que cae por la torrentera ha aumentado una barbaridad, y ahora ya no vale pegar el salto que hice antes, por lo que no habrá más remedio que localizar un sitio donde no cubra mucho, y atravesarlo lo más rapidamente posible. Tengo tantas ganas de acabar que no me apetece ni descalzarme

Voy bordeando el embalse, esta vez sin pérdida, hasta llegar de nuevo al puente...

y a los Orris de Carla

Se acabó. Han sido casi catorce horas de pateada y 2100 metros de desnivel positivo, pero he acabado muy contento por haber podido finalizar este recorrido ya que partía con la incertidumbre de saber si se hubiese podido realizar. Además, también he conocido un precioso valle, al cual tengo intención de volver con la familia, el Pays d'Auzat Vicdessos