PICO DE ALBA

Ascensión al Pico de Alba, el tresmil principal más occidental del Macizo de la Maladeta en compañía de Alfonso, Javi y Miguel, utilizando como itinerario de subida la vía normal que desde el Refugio de la Renclusa gana altura a través del Barranco de Alba.
Como itinerario de descenso, realizando de esta manera un bonito recorrido circular, utilizaremos el Valle de Alba, a través del cual descenderemos hasta los Baños de Benasque.
La cima fue ascendida por primera vez por el Conde Russell junto con el guía de Luchón Jean Haurillon, uno de los conquistadores también de la Arista de Cregüeña al Pico Maldito.
Croquis del recorrido desde el Refugio de la Renclusa hasta el Hotel Turpi.

Perfil del recorrido

Tras quedar citados y comer en Benasque, nos dirigimos a los Baños de Benasque con intención de dejar uno de los vehículos estacionado allí. Desafortunadamente, la carretera de acceso está cortada por la nieve, por lo que tendremos que dejarlo junto al Hotel Turpi, lo que hará que al día siguiente tengamos que añadir otros casi 200 m. de desnivel al ya de por sí largo descenso.
Tras estacionar el otro vehículo en el parking del Plan de l'Hospital, comenzamos la ascensión.

Utilizaremos las pistas de esquí de fondo para llegar a La Besurta, y de aquí afrontaremos el último tramo de la ascensión de una manera más directa (y empinada) que la que se utiliza en verano.

En algo más de dos horas llegaremos al Refugio de la Renclusa

Desde aquí contemplaremos nuestro objetivo de mañana:

Un poco más tarde de la cinco de la mañana comenzaremos la ascensión. No hace mucho frío, pero sí lo suficiente como para que sea necesario utilizar los crampones desde el mismo refugio.

Ganamos altura rapidamente (es extraño no ver el Ibón de la Renclusa, oculto bajo varios metros de nieve) y al llegar a la altura del Collado de Paderna, ha clareado lo suficiente como para no ser necesario el uso de los frontales para avanzar

En lugar de utilizar el sendero habitual de verano que gana altura a través de un empinado contrafuerte rocoso, nos dirigiremos al valle que se encuentra bajo la Tuca Blanca de Paderna, recorrido habitual para los que ascienden desde los Tubos de Paderna.

Cualquiera que haya subido por aquí en verano, comprobará la ventaja de subir con todo este laberinto de rocas tapado por la nieve

La vertiente francesa se encuentra cubierta por una bonita bruma.

Últimos metros de esta agradable ascensión...

hasta llegar a un bonito mirador de los Picos de la Muela y el Diente de Alba

Ahora sí que nos encontramos bajo la cima del Pico de Alba. Utilizaremos como vía de ascensión a la cresta de la Tuca Blanca el corredor situado a la izquierda de los dos paralelos que se aprecian a la derecha de la panorámica.

Tras un corto descanso, continuamos la ascensión...

hasta penetrar en el corredor

Una vez en la arista, bordearemos esta (ya que se encuentra impracticable)...

y continuaremos la ascensión por el recorrido habitual de invierno que gana altura a través de una empinada pala de nieve hasta llegar a la antecima del Pico.

Salimos a escasos metros de la antecima

Las vistas son espectaculares:

Pero aquí hemos venido para subir a la cima. Para ello, tendremos que atravesar los escasos 25 metros que separan la antecima de la cima principal a través de una aerea arista.

A las 10:15 llegamos a la cima (3118 m) (Tresmil nº 172):

Unas banderas de plegaria budistas señalan la cúspide de la montaña

Unos pocos minutos más tarde nos juntamos todos en la cima

Un vistazo hacia las Maladetas Occidentales:

Hacia la Aguja de Alba (otra vez será...)

Hacia la Aguja Sur de Alba (¿?)

Hacia el Posets:

Perdiguero-Crabioules-Maupas-Boum

Antes de abandonar la cima, hay que continuar con la costumbre de depositar tres pequeñas piedras en ella (gracias Javi por fotografiar sin darme cuenta este emotivo momento...)

Bueno, estamos muy bien en la cima, pero todavía nos queda un larguísimo descenso hasta el coche, por lo que habrá que marcharse. Cruce de "cordadas" en la arista.

Recogemos las cosas y descendemos la empinada pala.

Al llegar a la base, podemos respirar tranquilos...

Ahora dejaremos el itinerario de ascensión, y comenzaremos el descenso hacia los Ibones de Alba.

Descendemos bajo el imponente cresterío de los quince gendarmes

Un último vistazo atrás

Llegamos al segundo de los Ibones de Alba

Decidimos, ya que la nieve está de una calidad fenomenal, descender directamente al primero de los Ibones por una vertical torrentera totalmente cubierta de nieve.

Bordeamos con cuidado el Ibón...

Descansamos un rato, mientras nos quitamos los crampones, y echamos un último vistazo hacia la cumbre ascendida y la bonita arista de los 15 gendarmes.